sábado, 25 de mayo de 2013

Perfume

“La muchacha no intentó gritar, 
no se movió, no hizo ningún gesto 
de rechazo y él, por su parte, no la miró. 
No vio su bonito rostro salpicado de pecas, 
los labios rojos, los grandes ojos verdes 
y centelleantes, porque mantuvo 
bien cerrados los propios mientras 
la estrangulaba, dominado por una única 
preocupación: no perderse absolutamente 
nada de su fragancia.”

El perfume - Patrick Süskind.